SILKE: LA ACTRIZ QUE PINTA

Con dos películas a punto de estrenar y un proyecto personal que la apartará del cine al menos hasta mediados del año que viene, Silke ha inaugurado en Santa Eulària su segunda exposición individual, “Entre chicas y elefantes”, una continuación de la anterior, la que marcó su debut público como pintora, hace ahora exactamente un año, en Ibiza, donde reside desde hace años y de donde, asegura, cada vez le cuesta más trabajo moverse.

Ha tocado la guitarra y el piano, ha hecho ballet, hace cine, diseña y, además, pinta estupendamente bien. “Siempre he tenido mucha necesidad de expresarme a través de la artes”.

El baile, la música, la pintura son diferentes formas de interpretar o expresar lo que llevo dentro. Pinto desde pequeña pero digamos que en serio desde hace 3 ó 4 años”.

Pinta, sobre todo, mujeres que podrían ser una extensión de ella misma. “Me gusta buscar dentro de mí los personajes que interpreto, al final siempre expresas tu forma de ser”.

Mujeres cándidamente sensuales, con un punto de timidez y exotismo y una belleza naïf que se desenvuelven en gestos de la vida cotidiana: en la bañera, frente al tocador o en el placer de un cigarro en solitario.

Realismo próximo a la ilustración y la estética animada en óleos que dan forma a un estilo “que puede gustar o no pero creo que es muy particular”.

Admiradora, entre otros, de Gustav Klimt y la mejicana Remedios Varo, esta madrileña de 33 años polifacética e intrépida fue una de las actrices estrellas en nuestro país en la década de los 90.

El estreno de tres exitosas películas en tan sólo 5 meses (Tierra, Hola ¿estás sola? y Tengo una casa) la convirtió en uno de los rostros más populares del cine español. Julio Medem tuvo mucho que ver en ello.

Hoy se lo toma con más calma (“el reciclaje generacional es necesario”), y huye de la fama, cuidándose mucho de excesivas promociones y dedicando su tiempo a viajar y a perfeccionar su destreza con los pinceles.

“Aprendí a pintar con los libros de Parramón, me los compré todos. Y aún me queda mucho por aprender”.

Entre chicas y elefantes podrá visitarse hasta el próximo 27 de julio en horario de tarde en la galería Property and Art, en la Villa del Río, justo después de atravesar el puente a la izquierda, en la calle San Vicente 1.