CRÓNICA MUSICAL DE LA SEMANA: DEL 16 AL 23 DE MAYO

Anoche de madrugada -estoy segura que este horario fue planeado con premeditación y alevosía- mi diario de bitácora llegó con furia impertinente golpeando sus alas contra el cristal de la ventana de mi cuarto. Una vez que entró, no se dignó en dar explicación alguna y con unos aires de “faraona” se instaló sobre mi mesita de noche con unas alas relucientes envolviendo sus lomos…
Me quedé atónita y en ese estado de estupidez transitoria vinieron a mi cabeza una gran cantidad de insensateces y pensamientos acertados. Creo que mi diario ha dejado clara su postura. Ya hizo su parte y de nuevo se sienta a descansar mientras yo me centro en mi trabajo: el de buscar músicas y músicos allá donde se encuentren.

Esta semana, los aires perennemente internacionales de la isla se ponen a relucir de manera sugerente. El viernes 16 es Dominique De Larrand, el saxofonista franco-vietnamita afincado en la isla desde hace años, el que muestra su buen hacer al saxo en Santa Eulalia en el Nina’ s Bar. De Santa Eulalia me vengo a Ibiza porque oí que Javier Ortega ya ha vuelto al Itaka y no pienso perderme ni sus monólogos ni sus canciones.

El sábado 17 vuelvo a tomar el camino a Santa Eulalia porque Reco Bastos y Groove Brasil tocan en el Harbour Bar. El cearense Reco (voz) va acompañado por el carioca Fabiano Nascimento a la guitarra y voz y por Raúl a la batería y la guitarra.

De ciudad en ciudad me vuelvo a Ibiza. Es una noche melancólica: el bajista del Pereyra, el cubano Raúl Frometa vuelve a su segunda patria, Italia, y se acaban las noches de salsa. Me contaron que ya se oyen ecos de blues por las paredes…

Pero el domingo no me lo quitaron de las manos y sigo con el seguimiento a Dominique de Larrand que tocará en el Villa Mercedes y el Putumayo café en una tarde meteórica que me dejará de nuevo, como cada domingo en la noche, lista para abandonarme en los brazos alados de mi diario cuando llegue a casa. Parece que vayamos desarrollando afectos más allá de lo filial.

Es lunes 19 y se confirman las sospechas. Durante un mes al menos Dave Blues hará honor a su apodo y pondrá voz a estos ritmos que salen de las entrañas mismas de América. Le acompañan el todoterreno Allan Christie a la guitarra -es un lujo escuchar su fraseo impecable-, a la batería Vitorio Cabalcante, y Rafa Garcés al piano y saxo. Ya no se recogerán los músicos a la hora del cierre del Pereyra con las risas de Raúl de fondo y por un tiempo estaremos un poco melancólicos. Lo bueno si breve dos veces bueno… dicen.

El martes 20 iré tranquila y confiada a mi “cantito” del Pereyra a sentir la melancolía que el blues deja en las venas, para acabar en el Itaka con Pilar hablando de mi vida y la de otros clientes, en clave, a través de la elección de su repertorio.

El miércoles 21, con hambre ya acumulada, pasaré por el Ke Café a escuchar a Víctor Gressly al piano. Como siempre un placer combinar buena música y buena comida. De ahí en un abrir y cerrar de ojos llegará el jueves con prisas porque llegue la hora en la que el blues se me vuelva a meter por debajo de la piel para que la semana pase rápido. Que el verano se acerca y hay que ir organizando el orden de asistencia a los eventos…

Por Nela Escribano.


 

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