Enamorados del Espacio Micus

Enamorados del Espacio Micus

Eduard Micus creó con sus propias manos el lugar idóneo para mostrar su amplia y vasta obra, caracterizada por el contraste y, a partir de un momento, por la técnica del ‘coudrages’. Un espacio vanguardista para la abstracción.

A falta de argumentos que demuestren lo contrario, creemos poder afirmar que el Espacio Micus es el lugar más especial de todos los dedicados al arte que hay actualmente en Eivissa. Lo construyó el propio Eduard Micus (1925-2000), recreándose de esta forma en otra de sus grandes pasiones, la arquitectura. Un espacio que el alemán ideó para exponer su propia obra, vastísima, y es que estaba firmemente convencido de que si los cuadros se exponían en el lugar adecuado se venderían mucho mejor.

Micus dibujó, pero sobre todo pintó. El contraste fue el principio formal de su creación; un estilo marcado por la exigencia de la sencillez en la depuración de lo elemental y la división del cuadro por una línea como frontera metafórica, base del coudrages, aportación original del autor a la Historia del Arte y, sin duda, uno de sus legados más significativos.

Un estilo en el que la forma es concebida como contenido. Tras su muerte, su museo-taller fue convertido en galería de arte contemporáneo, con predilección por la creación abstracta.

“Me siento obligada como heredera universal a mantenerlo abierto, a mostrar lo que mi padre hizo y a compartirlo con los que aman el arte”, explica Katja, directora del Espacio Micus.

Cómo llegar a la galería:
El Espacio Micus se encuentra en la carretera de Jesús a Cala Llonga, km 3 (a la izquierda). Sólo abre los domingos y festivos o previa cita telefónica:
(0034 971-191-923).

El Espacio Micus se encuentra en la carretera de Jesús a Cala Llonga, km 3 (a la izquierda). Sólo abre los domingos y festivos o previa cita telefónica: (0034 971-191-923).