 
 
Con las prisas cotidianas  dejamos de sentirnos, olvidamos nuestra esencia. Quisiéramos perdernos de todos los problemas, preocupaciones, miedos y angustias que nos dejan pequeños e indefensos ante el ruido del mundo. 
 
Decidimos huir de ellos. Llegamos a una playa  paradisíaca. Nos expandimos en la naturaleza, todo nos asombra. Volvemos a nuestro interior descubrimos nuevas sensaciones: la calma, la serenidad, la alegría.
Nos dejamos mimar con un masaje, unas sales en el cuerpo, un baño de vino, una caricia de chocolate, un brillo en oro. 
Activamos, drenamos, nutrimos, pintamos y embellecemos nuestro cuerpo. A medida que cambiamos el afuera, inevitablemente algo va cambiando dentro.
Laura Felicetti  
Manager
IBIZAMASSAGE.COM
GUÍA PARA PERDERSE EN LA 
VIDA ARTÍSTICA DE IBIZA
¿Tienes algo que aportar? FORUM-CLICK
 
 
				
				
				
			
Leave a Comment