En el acto de inauguración estuvieron las principales autoridades de esta entidad, además de los delegados de una veintena de ONGs que están vinculadas a los proyectos y al área de influencia del Fons Pitiús, en cooperación internacional y co-desarrollo.

Al evento, que comenzó desde las 10 horas con el montaje y la exhibición de las casetas de información de la entidades, le siguieron actividades de recreación dirigidas a niños, familias y visitantes. A partir de las 11.30 comenzaron las intervenciones de las autoridades.

Entre las entidades participantes se podían contar a la Cruz Roja de Eivissa y Formentera, el proyecto de la Botiga Solidaria, con su propuesta de comercio justo, Manos Unidas, Paz con Dignidad, Infancia con Futuro o Comunidad Humana. Cada una de las mesas de información ofrecía amplia información sobre proyectos y actividades realizadas por cooperantes, voluntarios en países como Asia, África y América Latina.

Para Puchie Rial, una voluntaria tibetana que vive en Puig d’en Valls, la colaboración humanitaria que puedan hacer los países desarrollados es muy importante para mejorar el nivel de vida y las condiciones de grandes sectores de países que requieren de mucho apoyo. Puchie es voluntaria de Comunidad Humana, una ONG que comenzó sus actividades humanitarias en octubre de 2005, con el objetivo de encauzar ayuda hacia la solución de la problemática de niños necesitados en Tíbet.