NAVIDAD RESPONSABLE
El inconfundible olor a salsa de nadal, el bescuit, las luces titilantes en las calles, el frío húmedo del invierno y las chimeneas encendidas… mucho más que una fecha en el calendario: es un ritual colectivo que nos recuerda la importancia de la familia, la solidaridad y la esperanza. Las mesas se llenan de recetas heredadas, los villancicos se convierten en banda sonora y los regalos simbolizan afecto. Sin embargo, detrás de esta postal entrañable se esconde un desafío que no podemos ignorar: el impacto ambiental de nuestras celebraciones.