El día del equinoccio de primavera, el sol recorre el ecuador saliendo exactamente por el Este y poniéndose exactamente por el Oeste; su declinación es cero y se está doce horas sobre el horizonte. A partir de entonces y hasta el solsticio de verano, el sol cada día sale por un punto del horizonte un poco más al norte del punto cardinal Este, y se pone entre el Norte y el Oeste, culminando cada vez más alto.

El 21 de marzo comienza de forma oficial la primavera y los pueblos clásicos comenzaban el año este día; hacían coincidir su inicio con el desvelo de la Naturaleza, aparentemente adormecida por el frío durante el invierno. Roma empezó el año este día hasta el 153 antes de Cristo, en que fue traspasado oficialmente al mes de enero. La cultura naturalista imitó el calculo mediterráneo que persistía en mantener vivas les fiestas populares que marcaba en el tránsito de las dos estaciones. En Francia se mantuvo el Fin de año en el mes de marzo hasta el año 1653 y el papa Inocencio XII no lo estableció al primero de enero hasta el año 1657.

Oreneta primerenca
Primavera calorenca.

 

En Ibiza, como ha hecho siempre la gente en contacto con la tierra se considera el año dividido en dos grandes estaciones: el invierno y el verano. La idea de la primavera es casi inexistente. Ello es debido a que ahora comienzan los preparativos de la temporada donde todos estarán muy ocupados hasta el mes de octubre que retornará la calma a la isla.

 

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