NAVIDAD RESPONSABLE
El inconfundible olor a salsa de nadal, el bescuit, las luces titilantes en las calles, el frío húmedo del invierno y las chimeneas encendidas… mucho más que una fecha en el calendario: es un ritual colectivo que nos recuerda la importancia de la familia, la solidaridad y la esperanza. Las mesas se llenan de recetas heredadas, los villancicos se convierten en banda sonora y los regalos simbolizan afecto. Sin embargo, detrás de esta postal entrañable se esconde un desafío que no podemos ignorar: el impacto ambiental de nuestras celebraciones.




Las noticias más recientes acerca del mercado mundial de gas natural han llevado a la Comisión Europea a elaborar un plan en previsión de un corte del suministro ruso de esta materia prima. En principio, estas medidas exigirían a cada país miembro un ahorro del 15% en su consumo. Sin embargo, la deficiente interconexión eléctrica de España con el resto de la UE ha provocado que este recorte sea del 7% para los países ibéricos.
Más allá de la catástrofe humanitaria que representa el conflicto armado en Ucrania, los medios de comunicación llevan meses avisando de sus consecuencias sobre la recepción del turismo ruso. A causa de ello, ya estamos familiarizados con algunos rasgos de este tipo de visitantes como su mayor poder adquisitivo, sus estancias más largas o su tendencia a viajar a Cataluña o a la Comunidad Valenciana.
Los profesores y profesoras tenemos diversas asignaturas pendientes que año a año se enquistan en la lista de “necesita mejorar”. Hoy hablaremos de algunas de las más veteranas, el promover el gusto por la lectura y el conocimiento básico de los clásicos en el alumnado adolescente.
