Es sabido que en la isla de Ibiza la introducción de culebras durante los últimos años está causando estragos entre la población de especies autóctonas como la lagartija. Ahora, con la posibilidad de cocinar estos ofidios, se vislumbra un horizonte nuevo que puede cambiar la gastronomía isleña.

Las diferentes especies de ofidios introducidos en la isla son: la culebra de escalera (Rhinechis scalaris); la de herradura (Hemorrhois hippocrepis) y la bastarda (Malpolon monspessulanus); las dos primeras se han naturalizado sin apenas problemas en las dos islas, mientras que la tercera es la más rara de encontrar.

Su carne se considera un valioso producto alimenticio, y muchas personas alaban su sabor, por lo que cada vez más gente que siente el deseo de probarla. Los verdaderos entendidos sostienen que es necesario cocinar un ejemplar recién cazado y su preparación no es demasiado compleja. Para que el plato sea sabroso y seguro, necesita conocer algunos puntos importantes:

Las cabezas de las culebras deben cortarse antes de cocinarlas y conviene realizarlo de forma inmediata. Se recomienda colgarla con la cola hacia arriba durante algún tiempo, para que la sangre se drene. Después, se debe hacer una incisión desde la cola hasta la cabeza con unas tijeras o un cuchillo y se retira la piel.

Hay diferentes formas de prepararla: frita, en sopa, asada, a la barbacoa, marinada con arroz…

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